Antes de entrar en levaduras y bacterias, hagamos un pequeño repaso sobre el producto lácteo fermentado más famoso y antiguo del mundo: el Kéfir.
¿Qué es el kéfir?
El Kéfir es una bebida de leche fermentada parecida al yogurt. Se obtiene de la doble fermentación de los “granos de kéfir”. Estos granos, que contienen levaduras y bacterias, cuando fermentan la leche dan como resultado el Kéfir.
Un bendito accidente
Kéfir significa ‘sentirse bien’ en turco. Se cree que el Kéfir lo descubrieron por accidente los pastores de Europa del Este hace miles de años. Conservaban la leche en sus bolsas de piel y la encontraron fermentada accidentalmente. Pronto descubrieron que no solo tenía un sabor distinto y especial, también aportaba muchos beneficios para el organismo. Así que esta bebida fermentada empezó a consumirse en todos los continentes.
Beneficios Activia Kéfir Auténtico
Los granos de Kéfir, tienen millones de microorganismos probióticos, vitaminas y minerales en su interior. Entre ellos, hay bacterias del grupo lacto y levaduras beneficiosas, que ayudan al proceso de digestión y al sistema inmunológico.
Activia Kéfir es el N1 en diversidad de probióticos ya que contiene millones de probióticos exclusivos, fermentos de kéfir de origen 100% natural y probióticos de Activia. La combinación perfecta que aporta muchos beneficios a nuestro organismo.
¿Cuándo consumir Activia Kéfir?
El Kéfir de Activia es perfecto para equilibrar tu microbiota cada día e ideal para empezar el día cuidando tu salud digestiva. ¡Disfruta de su textura ligera y delicioso sabor suave en cualquier momento del día, para llevar o mezclar!
Kéfir, beneficios para el organismo
Los beneficios del kéfir son variados. Al tener una composición tan compleja de bacterias, levaduras, vitaminas y minerales, puede ayudar a nuestro organismo de muchas maneras distintas.
Puede ayudar a equilibrar y regenerar tu flora intestinal. Como alimento rico en probióticos, ayuda a regenerar la microbiota intestinal. Esta, puede estar en desequilibrio por distintos factores: una mala dieta, el uso de medicamentos… El Kéfir puede ayudar a reestablecer ese equilibrio y luchar contra enfermedades gastrointestinales así como mejorar la digestión.
Puede fortalecer tu sistema inmunitario. El Kéfir contiene muchos compuestos y nutrientes que pueden ayudar a proteger las células del sistema inmunológico. Además, con su alto contenido en probióticos, y en particular de lactobacillus, puede ayudar a defender nuestro organismo de bacterias dañinas e inhibir su crecimiento.
Ayuda a fortalecer tus huesos. No solo porque tiene un alto contenido en calcio, también contiene compuestos bioactivos que ayudan a absorberlo y detienen la degeneración ósea.
El Kéfir, también es rico en vitamina K2, que tiene un papel muy importante en la absorción del calcio. Además, los probióticos del Kéfir mejoran la absorción de los nutrientes y de los productos lácteos, que contienen altos niveles de calcio.
Ayuda a proteger el organismo de toxinas y alergias. Al fortalecer nuestro sistema inmunológico, el Kéfir también nos ayuda a suprimir algunas reacciones alérgicas y toxinas.
Ayuda a disminuir la presión arterial y las concentraciones de colesterol malo.